Importancia del departamento jurídico.

Iniciar actividades o si ya se tienen en práctica, atendiendo al sector económico, en ocasiones representa un verdadero reto, particularmente para crecer el negocio, pues si bien ponemos en marcha nuestras profesiones u oficios, a través de la aplicación de nuestros conocimientos, poco sabemos respecto de los límites que nos fija la ley o bien desconocemos también, aquellos derechos que podemos ejercer.

Abogado, viene del latín advocatus, cuyo significado es aquel que asiste a una persona en el juicio como consejero, es por ello que, el Abogado es aquel quien desarrolla las habilidades que permiten asesorar a una persona respecto de una situación particular y dado que nos encontramos ante una sociedad regida por un amplio marco jurídico, el Abogado es el estudioso de éste para ayudarnos a conocerlo.

¿Por qué es importante la asistencia legal?

Contar con una buena asesoría o acompañamiento legal, resulta de suma importancia, desde un enfoque empresarial, puesto que el tener una planeación antes de iniciar una nueva empresa, nos brinda un panorama más amplio respecto de los alcances, beneficios y limitaciones para cada sector, con ello se minimizan gastos y se fija la dirección que se quiera tomar en el futuro respecto de la administración del negocio.

Sucede que en ocasiones solo hemos “visto” que al amigo de un amigo le funcionó la creación de una empresa bajo cierto régimen, y buscamos emprender replicando el modelo de negocio, pero ¿qué hacer, cuando las cosas no ocurren como lo pensábamos? 

Son muchos los casos en que se constituye una sociedad, para lo cual se vuelve necesario el establecimiento en un lugar físico para la macha de los negocios, se requiere de contratación de personal, se comienza la relación con clientes y proveedores, se requiere de apertura de cuentas bancarias, se adquieren obligaciones ante las autoridades fiscales, entre otras.

Sin embargo, no transcurre mucho tiempo, cuando comienzan los problemas:

¿Cuáles son mis derechos y obligaciones como socio de esta empresa? ¿Qué cargo tengo dentro de la sociedad? ¿Necesito permiso para aperturar mi establecimiento? ¿Cuáles son mis obligaciones como empleador? ¿necesito firmar un contrato con mis clientes? ¿Qué sucede si estos no cumplen lo pactado? ¿Qué necesito para abrir cuentas bancarias a nombre de la sociedad? ¿puedo recibir pagos de la empresa en mi cuenta personal?

Ante esas y muchas otras preguntas, es necesario contar con la asesoría de un Abogado, ya que muchas de éstas cuestiones, si se planean con anticipación pueden prevenir gastos innecesarios.

José Roberto Gallardo Pineda

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